El cafe (Coffea arabica).

Nombres:
Latín: Caffea arabica L.
Castellano: Café, cafeto
Catalán: cafè
Vasco: kafetondo
Gallego-portugués: café
Francés: café
Italiano: caffé
Inglés: coffee
Alemán: Kaffeebaum

Taxonomía:
Familia: rubiáceas
Tipo: arbusto lampiño de hasta 6 metros de altura en estado silvestre.
Hojas: perennes, opuestas, ovales, enteras, duras y brillantes por el haz.
Flores: color blanco, aromáticas. Tienen 5 pétalos.
Floración: desde febrero hasta mayo.
Fruto: bayas que aparecen entre septiembre y diciembre, de color rojo pálido y aplanadas por un extremo.
Originario: Arabia y Etiopía
Parte utilizada: Las semillas tostadas y las hojas también.

Propiedades:
Estimulante
Antisoporífera
Antiemética
Diurético


Administración:
Puede administrase en infusiones y extracto fluído.
En cantidades excesivas ejerce un efecto contraproducente sobre el sistema nervioso y digestivo, además de producir cálculos renales.
Su uso abusivo provoca insomnio, irritabilidad y diarrea debido al aumento del peristaltismo intestinal.
Esta considerado asímismo, un factor de riesgo en el padecimiento del cáncer de páncreas.
Vómitos

Indicaciones:
Dolor de cabeza (Café amargo y limón)
Digestión (En cantidades discretas)
Adición al opio
Edemas renales
Fiebres (Hojas en infusión)

Las semillas naturales contienen:
Alcaloides
Cafeína (hasta un 4%)
Taninos
Acidos cafeotánicos
Acido cafeico
Acido clorogénico
Quinonas
Acido viridénico
Trigonelina

Las semillas tostadas contienen:
Pirroles
Ácido palmítico
Cafeol (aceite volátil)

Otras características:
El conocido aroma peculiar del café se debe a la "cafeona" principio de composición muy compleja conteniendo más de 200 sustancias.
Para aquellos que abusan del café, es beuno que sepan que una taza tan solo, obliga a 24 horas de trabajo al riñón.
Con las hojas jóvenes del café tostadas se elebora una bebida que contiene más cafeína que el elaborado con las semillas.
Si se endulza el café con azúcar, se mejora notablemente su tolerancia, debido a que la sacarosa retrasa la fijación de la cafeína en las células nerviosas haciéndolas menos sensibles a sus efectos.
La adicción al café se denomina cafeinismo.
Su nombre viene de "Kaffa", una zona alta de Etiopía.
Cuenta una leyenda que fue descubierto por un pastor que al observar que sus cabras comían las bayas y se sentían estimuladas y agitadas, decidió probralas notando su efecto tónico y estimulante.