Depresión: Lo que debe
saber: (I)
La vida está llena de altas y bajas. Pero cuando
las "bajas" duran demasiado o afectan su capacidad para desempeñarse
en su rutina diaria, es posible que usted tenga una enfermedad común,
pero muy seria: depresión. La depresión clínica afecta su estado
de ánimo, su condición mental y física, y su comportamiento. En
EE.UU. se han realizado estudios que demuestran que cada año aproximadamente
19 millones de personas--uno de cada diez adultos--sufren de depresión.
Casi un 60% de esas personas no obtienen la ayuda que necesita.(9)
Con tratamiento, se alivian los síntomas en más de un 80% de los
casos. Sin embargo, como a menudo pasa desapercibida, la depresión
sigue siendo una causa de sufrimiento innecesario.
La depresión es una enfermedad incapacitante. Ocurre
tanto en mujeres como en varones, pero la tasa de incidencia en
la mujer es casi el doble que en el hombre.(1)
Actualmente, se siguen realizando estudios para investigar si las
características particulares de la mujer--factores biológicos, ciclo
de vida, aspectos psicosociales--pueden ser causas de la alta incidencia
de depresión en las mujeres.
La depresión afecta a cada persona de una manera
diferente. Muchas personas solamente manifiestan algunos de los
síntomas, los que pueden variar en severidad y duración. Para algunos,
los síntomas se manifiestan en episodios cortos; para otros, los
síntomas pueden durar por mucho tiempo si no se obtiene tratamiento.
Tener algunos síntomas de depresión no significa que una persona
está deprimida clínicamente. Por ejemplo, es normal que quien haya
perdido un ser querido se sienta triste y no muestre interés en
las actividades cotidianas. Si estos síntomas persisten por un período
largo, entonces se puede sospechar que la tristeza se ha convertido
en depresión. De igual manera, vivir con el estrés de la posibilidad
de perder el empleo, de exceso de trabajo, o de problemas económicos
o familiares, puede causar irritabilidad y "bajas" en el estado
de ánimo. Hasta cierto punto, sentirse así es simplemente parte
de la vida. Pero si la persona siente estas cosas por mucho tiempo
y con mayor intensidad, y llega a afectarse también su vida cotidiana,
entonces lo que parecía ser un cambio en estado de ánimo puede haberse
convertido en una condición clínica.
Tipos de Depresión:
- En la depresión grave, a veces
conocida como depresión unipolar o clínica, las personas tienen
algunos o todos los síntomas mencionados abajo por al menos 2
semanas. Con frecuencia los tienen por varios meses o más. Los
episodios de la enfermedad pueden ocurrir una, dos, o varias veces
en el transcurso de la vida de una persona.
- En la distimia (o depresión "menor"),
los mismos síntomas están presentes de manera más leve, y duran
por lo menos 2 años. Las personas con distimia a menudo están
faltos de ánimo y entusiasmo por la vida, y viven una existencia
sin júbilo y energiá que casi parece ser una extensión natural
de su personalidad. También pueden sufrir de episodios de depresión
grave.
- La enfermedad maniáco-depresiva,
o trastorno bipolar, no es tan común como las otras formas de
depresión. Se caracteriza por períodos de depresión que alternan
con períodos de manía. Durante los episodios de manía, las personas
pueden tornarse hiperactivas, eufóricas, e irritables. Pueden
malgastar dinero y hasta involucrarse en conducta sexual inapropiada.
En algunas personas, con los episodios depresivos se alterna una
forma más leve de manía, conocida como hipomanía. A diferencia
de otros trastornos afectivos, las mujeres y los hombres tienen
la misma vulnerabilidad a sufrir del trastorno bipolar; sin embargo,
las mujeres con trastorno bipolar tienden a tener más episodios
de depresión y menos episodios de manía o hipomanía . (5)
Síntomas de la depresión y la manía:
Si de tres a cinco o más de los siguientes síntomas
persisten por más de 2 semanas (1 semana en el caso de la manía),
o si interfieren con el trabajo o la vida familiar, el paciente
debe obtener una evaluación diagnóstica exhaustiva. Esta evaluación
debe incluir un examen físico completo y la historia familiar. No
todas las personas con depresión manifiestan todos estos síntomas.
La severidad de los síntomas varía de persona a persona.
Depresión
- Estado de ánimo de tristeza persistente, ansiedad
o "vacío"
- Pérdida de interés o placer en actividades que
antes disfrutaba, incluso las relaciones sexuales
- Inquietud, irritabilidad o llanto excesivo
- Sentimientos de culpa, de no valer nada, de impotencia,
desesperanza y pesimismo
- Dormir demasiado o muy poco, levantarse muy temprano
en la mañana
- Pérdida de apetito o peso, o ingesta excesiva
de comidas y aumento de peso
- Disminución de energía, fatiga, sensación de
estar "en cámara lenta"
- Pensamientos de muerte o suicidio, o intentos
de suicidio
- Dificultad para concentrarse, recordar o tomar
decisiones
- Síntomas físicos persistentes que no responden
al tratamiento, tales como dolores de cabeza, trastornos digestivos
y dolor crónico
Manía
- Estado de ánimo exaltado de manera anormal, euforia
excesiva
- Irritabilidad
- Menor necesidad de dormir
- Delirio de grandeza
- Hablar demasiado, rápido, o sin parar
- Pensamientos descontrolados
- Aumento de la actividad, incluso la de tipo sexual
- Marcado aumento en energía
- Poco sentido común que lleva a comportamientos
riesgosos
- Conducta social inadecuada
Causas de la depresión:
1. Factores genéticos
Existe un mayor riesgo de padecer de depresión clínica
cuando hay una historia familiar de la enfermedad, lo que indica
que se puede haber heredado una predisposición biológica. Este riesgo
es algo mayor para las personas con trastorno bipolar. Sin embargo,
no todas las personas que tienen una historia familiar tendrán la
enfermedad. Además, la depresión grave también puede ocurrir en
personas que no tienen ninguna historia familiar de la enfermedad.
Esto sugiere que hay factores adicionales que pueden causar la depresión,
ya sean factores bioquímicos, o ambientales que producen estrés,
y otros factores psicosociales.
2. Factores bioquímicos
Se ha demostrado que la bioquímica del cerebro juega
un papel significativo en los trastornos depresivos. Se sabe, por
ejemplo, que las personas con depresión grave típicamente tienen
desequilibrios de ciertas substancias químicas en el cerebro, conocidas
como neurotransmisores. Además, los patrones de sueño, que se ven
afectados por la bioquímica del organismo, son generalmente diferentes
en las personas que tienen trastornos depresivos. La depresión puede
ser inducida o aliviada con ciertos medicamentos, y algunas hormonas
pueden alterar los estados de ánimo. Lo que aún no se sabe es si
el "desequilibrio bioquímico" de la depresión tienen un origen genético
o es producido por estrés, por un trauma, o por una enfermedad física
u otra condición ambiental.
3. El ambiente y otros factores de estrés
Los siguientes se han definido como factores que
contribuyen a la depresión: la pérdida de un ser querido, problemas
en una relación, problemas económicos, o un cambio significativo
en la vida. A veces el comienzo de la depresión ha sido asociado
con el de una enfermedad física aguda o crónica. Además, aproximadamente
una tercera parte de las personas con cualquier tipo de trastorno
depresivo también exhiben de alguna manera un trastorno de alcoholismo
o farmacodependencia.(7)
4. Otros factores psicológicos y sociales
Las personas con ciertas características tales como
pesimismo, baja autoestima, sensación de falta de control sobre
las circunstancias de la vida y tendencia a la preocupación excesiva
son más propensas a padecer de depresión. Estos atributos pueden
resaltar el efecto de las situaciones de estrés o interferir con
la capacidad de enfrentarlas o reponerse de las mismas. La crianza
y las expectativas relacionadas con el sexo femenino pueden contribuir
al desarrollo de estos rasgos. Aparentemente, los patrones de pensamiento
negativo típicamente se establecen en la niñez o adolescencia. Algunos
expertos han sugerido que la crianza tradicional de las niñas puede
fomentar estos rasgos y posiblemente es un factor determinante en
la alta incidencia de depresión en la mujer.
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Departamento de contenidos
Adolfo Garcia de Tiedra.
Farmacéutico Comunitario.
21 de septiembre de 2002
Artículo
basado en estudios del Center for Diease Control de Atlanta (EEUU)
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