Cuando
pesa el corazón...
La
tensión arterial, es la presión con que circula la
sangre por el interior de las arterias. Los valores son dos, de
sobra conocidas: la máxima y la mínima o mejor la
tensión sistólica y la tensión diastólica.
La primera responde a la fuerza de expulsión del corazón
y la rigidez de las grandes arterias, la segunda coincide con el
momento de dilatación cardiaca.Resulta muy dificil indicar
cuales son los valores normales, de hecho hablaremos de intervalos
de tensión baja, normal y alta:
Es
importante saber que de una única medición alta no
debemos deducir un estado de hipertensión arterial, esto
es, una medición alta es una alerta que nos indica que debemos
controlarnos, consultar con nuestro médico y si este lo estima
oportuno realizar un seguimiento pormenorizado de nuestro caso.
Factores
de riesgo y complicaciones
La hipertensión arterial pasa desapercibida hasta
que, en el mejor de los casos en una revisión médica
rutinaria se descubre por casualidad, y en el peor se producen complicaciones
graves provocadas por dicha patología. Las personas de riesgo
son no solo las de edad avanzada sino también fumadores,
personas con sobrepeso y/o falta de ejercicio, personas que padecen
diabetes y enfermos renales y por supuesto todo aquel sometido a
estados de estrés. Es aconsejable a partir de los 40 años
comprobar nuestra tensión arterial de vez en cuando, y especialmente
aquellas personas con antecedentes familiares o con los factores
de riesgo antes citados.La hipertensión es la causa más
importante de enfermedades cardiovasculares pero no la única.
Otros factores como son la obesidad, el tabaquismo, niveles altos
de colesterol, también las favorecen. Cuando coinciden varios
de estos factores en una misma persona los riesgos se multiplican,
lo que aumenta extraordinariamente la posibilidad de padecer alguna
complicación como por ejemplo la arterosclerosis, enfermedad
de las arterias que tiende a ocluir su luz, con lo que órganos
vitales como el corazón, el cerebro o los riñones
pueden ver afectado su riego. Las complicaciones de la hipertensión
tienen relación con su severidad, es decir, cuanto más
elevadas cifras de tensión, mayor probabilidad, aunque formas
menos graves no se pueden considerar exentas de riesgos especialmente
si coincide algunos de los factores antes mencionados.
Cómo
prevenir
Se puede retrasar la hipertensión si se corrigen los factores
favorecedores como son: disminución de la ingesta de sal
en los alimentos sustituyéndolo por otros condimentos, pérdida
de peso en aquellas personas que padezcan sobrepeso y obesidad,
evitar los alimentos ricos en grasas sobre todo si éstas
son animales, ingerir alimentos ricos en fibra como verduras frescas,
práctica de ejercicio físico de forma regular (no
se trata tanto de practicar un deporte de gran esfuerzo físico,
sino más bien caminar al menos una hora al día); por
supuesto eliminar los hábitos de vida no saludables como
son el tabaco y el alcohol.
Control
regular de la tensión arterial
Las personas que han sido diagnosticadas de hipertensión
han de seguir un tratamiento para normalizar sus valores tensionales.
Para comprobar la eficacia del mismo se debe tomar la tensión
arterial de forma regular. Este control se puede realizar de diversas
maneras. La forma habitual es la consulta del médico donde
se efectúa el diagnóstico y se recomiendan las modificaciones
del tratamiento. Sin embargo es de sobra conocido que algunas personas
en presencia del médico presentan valores tensionales más
altos de los que habitualmente mantienen. A esto se le llama "hipertensión
de bata blanca". Por ello la aportación en cada visita
de los valores tensionales tomados en nuestra vida diaria, casa
o trabajo, resulta de gran importancia para establecer la pauta
terapeútica más adecuada.Para medir la tensión
arterial fuera de la consulta del médico podemos acudir a
nuestra farmacia de confianza o bien disponer de un aparato
de medición fiable y por su puesto fácil de usar en
casa. Este tipo de aparatos mide la tensión arterial por
la oscilación de la arteria braquial durante el desinflado
del manguito, y muestra el valor automáticamente en la pantalla.
La
realización de la medición en casa ha de realizarse
aproximadamente a la misma hora cada día, sentado y con el
brazo extendido sobre una mesa a la altura del corazón. La
tensión se debe medir en reposo y no tras una comida copiosa,
ingestión de café, tabaco, o cualquier elemento que
haga variar los niveles normales.
Elvira García de Tiedra
Farmacéutica comunitaria
www.mifarmacia.es
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